La Asociación Española para el Estudio de la Menopausia, define la menopausia como el momento fisiológico en la vida de la mujer en la que se produce el cese de la capacidad reproductiva, es decir, para la producción de los estrógenos ováricos.
En España, la edad media en la que la mujer suele entrar en el periodo de menopausia es de unos 51 añ0s, entre los 45 y 55 años. Además entre 2 y 4 años antes de la retirada definitiva de la menstruación hay un periodo llamado perimenopausia, en esta etapa previa suelen aparecer los primeros síntomas como son los cambios en el ciclo menstrual, sofocos, sequedad vaginal, insomnio, etc.
Cuándo halamos de menopausia precoz, se refiere a mujeres menores de 40 años que presentan desaparición de la menstruación durante un año. La falta de menstruación supone la interrupción en la producción de las hormonas femeninas, lo que incide directamente en la pérdida de la capacidad reproductiva de la mujer y por tanto, en su imposibilidad de quedar embarazada si así o desea.
Unido a la incidencia de la menopausia precoz aparece otro factor psico-social como es el retraso de la edad de la maternidad en las mujeres más allá de los 35 años, edad en la que la fertilidad de la mujer cae en picado. Por lo que las posibilidades de conseguir un embarazo son mínimas.
En este contexto toman relevancia las técnicas de reproducción asistida para estimular la fertilidad de la mujer y lograr así el embarazo que desean. Técnicas como la preservación de la fertilidad, a través de la congelación de los óvulos en edad fértil (antes de los 33/35 años) o recurrir a la ovodonación, si no se ha preservado anteriormente la fertilidad, suelen ser los tratamientos más eficaces para pacientes premenopaúsicas.
La aparición de la menopausia precoz está determinada principalmente por el factor genético. Es posible estimar la aparición de la menopausia de una mujer según los antecedentes de la madre y/o hermanas. Sin embargo, actualmente sabemos que existen otros factores externos que pueden producir una disminución de la reserva ovárica de la mujer y que aceleran la llegada de la menopausia en edades tempranas, por lo que evitarlos nos puede proteger de una menopausia precoz.
Algunos factores que influyen en la aparición de la menopausia precoz son:
- Malos hábitos de salud como el alcohol y el tabaco
- Bajos niveles de vitamina D. Estudios recientes señalan que niveles bajos de vitamina D están relacionados con una mayor incidencia de esterilidad, menopausia precoz y osteoporosis. Por lo que se aconseja tomar el sol, al menos 10 ó 15 minutos al día.
- Una mala alimentación, con abuso de carnes rojas o precocinados. La dieta recomendada seria una alimentación basada en frutas, verduras, legumbres y pescados.
- Evitar en lo posible el contacto continuado con sustancias químicas que actúan como disruptores endocrinos, como productos de limpieza, plásticos, determinados cosméticos, etc.
- El sedentarismo. Se aconseja hacer ejercicio físico.
